viernes, 5 de junio de 2020

MEDITACIONES DE LUNA LLENA. ECLIPSE DE LUNA- 5 de junio 2020

LUNA LLENA DEL MES DE GÉMINIS
A 15 de Sagitario
Con Eclipse Penumbral. Saros lunar 111.
Viernes 5 de junio 2020
Hora exacta de la Luna Llena: 16:14 hs (hora argentina)

Hora de máxima visibilidad 16:26 hs (hora argentina); se dará en el océano indico, entre Africa y la India, al este de Madagascar.

...................
Lo que sigue se basa en el texto de “Sinfonía de Zodíaco”, de Torkom Saraydarian. Lo que ofrezco en esta entrada es una recopilación casi textual, con sólo algunas frases o palabras de mi propio “archivo conceptual”. Cada tanto retraduzco con mis propios términos (o pongo entre comillas o entre paréntesis y corchetes algunos otros) de los que usa el autor, sobre todo cuando aparecen referencias relativas a la astrología esotérica a la que éste adscribe. Saraydarian es un seguidor de las enseñanzas del Tibetano y de Alice Bailey; confío en la resonancia universal de sus palabras e imágenes.
...................

Géminis, la “Tercera Luna Llena Mayor”: La Festividad de la Humanidad
Así la llaman algunos meditadores, que por eso han instituido esta fecha como un “Festival de la Humanidad” o de la “Buena Voluntad”. Hay una confianza en que las energías recibidas durante las lunas llenas anteriores se irradien en esta oportunidad hacia la humanidad a través de los “siete centros de energía” que, en lo cotidiano, podrían comprenderse como ramas del esfuerzo humano. Estas serían: la política, la educación, la filosofía, el arte, la ciencia, la religión y la economía.

Esta tercera Luna Llena nos hace meditar en el misterio del triángulo. Este tiene una propiedad asombrosa y es que puede multiplicarse infinidad de veces cuando cualquiera de sus lados forma a su vez otros triángulos.

En la “Doctrina Secreta”, Mme. Blavatsky nos dice (podemos tomar esto como una hermosa metáfora, como una realidad esotérica o como una hipótesis, según lo permita cada cosmovisión personal) que “tenemos tres soles”: uno sería el sol visible, otro sería el “corazón del Sol”, y luego tenemos todavía al “Sol espiritual central”, cuyo cuerpo visible es el sol que nos calienta diariamente. De estos tres soles, nos dice M.B., emanan “tres clases de fuego o electricidad”: el fuego por fricción, el fuego solar y el fuego eléctrico.

Para esta mirada esotérica, en la Luna Llena de Géminis el Corazón de ese “gran ser” (que llamamos “nuestro Sol”) se abre e irradia fuego solar hacia nuestro planeta. Este fuego es la energía que llamamos Amor.

Así como en Aries vemos arquetípicamente a Jehová y en Tauro al Buda, en Géminis vemos al Cristo. Lo vemos sobre todo como un “constructor de caminos o de puentes”: puentes en el interior del ser humano mismo, entre hombre y hombre, entre grupos, iglesias y naciones... Entre la humanidad y lo que está más allá de ella y la incluye.

En la primera Luna Llena Mayor, la de Aries, el voltaje recibido es el de la “voluntad”. En la segunda Luna Mayor la potencia de esta voluntad permite “ver” sin los velos engañosos de lo que habitualmente llamamos la realidad, y por eso se habla de “iluminación” en Tauro. En la tercera, estas energías se transforman en potencia amorosa. Esto nos dice que, sin amor, el poder de la voluntad no es algo seguro, y que la “luz” puede usarse equivocadamente. La “seguridad” (quizá podríamos decir mejor la “confianza intuitiva”) sólo se encuentra en el amor, pero éste a su vez necesita que la voluntad y la lucidez estén activos y sean protectivos.

La gran tarea de esta “construcción de puentes”, a partir del amor que simboliza Géminis, es que nada quede “aparte”.

Por ello, es una gran alegría conmemorar esta fecha, pero es enormemente triste sentir los terribles peligros que parecen acechar a la humanidad. Es preciso por lo tanto confiar que los hombres y mujeres “de visión” son finalmente más potentes que los poderosos ejércitos del mundo y los centros de poder financiero.

Una visión “verdadera” es sólo tal si es profundamente creativa. O sea, si testimonia el florecimiento de una idea dinámica que está en proceso de manifestación. Un hombre o una mujer “de visión” es alguien que transmite esas ideas, y hoy en el mundo no hay mayor poder que el de esas ideas sintonizadas con un orden más amplio e incluyente que el de las voluntades individuales.

Por todo esto, celebrar la Festividad de la Humanidad significa tener fe en la humanidad, confiar en su parte sana y creativa, apoyar a quienes trabajan en pro del crecimiento colectivo.

Las fuerzas planetarias ligadas a Géminis

En esta época de Luna Llena en Sagitario, del mes de Géminis, el Sol está transitando por este signo, como ya sabemos. Pero conviene recordar que, además, la constelación de Géminis está vinculada con una de las estrellas de la Osa Mayor, de la que se dice “transmite la energía universal del Amor”.
A su vez, el Sol de nuestro sistema transmite esta energía a través de Mercurio, regente exotérico de Géminis, y de Venus, regente esotérico. Que sincronísticamente hoy está al lado del Sol.


A Géminis lo forman dos grupos de estrellas, que diseñan dos columnas. Desde hace siglos, se las identifica con dos hermanos gemelos: Cástor y Pólux.

Según la leyenda, Cástor era mortal y Pólux inmortal. Eran dos guerreros griegos y uno de ellos, Cástor, fue herido y murió en una batalla contra los romanos. Su hermano Pólux quedó sin consuelo, y pidió a Júpiter permiso para sacrificar su vida como rescate por la de su hermano. Al dios le impresionó tanto su actitud, que concedió a Castor también la inmortalidad, y puso a ambos en los cielos, como estrellas de la constelación de Géminis.

Cástor está formado por tres estrellas, que desde el esoterismo simbolizan el vehículo triple de la personalidad. Pólux, por su parte, simboliza el alma humana inmortal. Se dice que desde hace 300 años la luz de Cástor está en menguante y la de Pólux en creciente. Los astrólogos esotéricos creen que se trata de una señal, que indica que la humanidad podrá ir madurando y equilibrando sus problemas de personalidad.

De increíble actualidad.

[Quiero recordarles que este texto de Saraydarian, escrito en 1980, toma como fuente el libro “Astrología Esotérica” de A. Bailey, escrito en base a enseñanzas del Tibetano. Este libro fue escrito a su vez en las primeras décadas del siglo XX. Observemos, por favor, su vigencia total,en este momento de repolarización radical en el planeta. En particular durante este plenilunio, donde sabemos que la oposición verifica su orbe puntual. Y que al coincidir con un eclipse lunar, favorece la limpieza de nuestros miedos ancestrales, en este caso, relativos al misterio de la Dualidad.


La carta horaria de este momento: 5 de junio a las 16:26, hora argentina.

Nos dice Saraydarian (en la década del 80): los hombres son bombardeados diariamente con literatura pesimista proveniente de fuentes tenebrosas que envenenan a la humanidad [actualmente esta función la realizan los medios masivos de comunicación]. En esta literatura leemos que: la tierra se hará pedazos, la radiación atómica contaminará a la tierra entera, la guerra y las armas nucleares barrerán la vida del planeta. El dinero perderá su valor y se esparcirá la bancarrota. [Y hoy en junio 2020, podemos agregar: que un misterioso virus nos amenaza a nivel planetario].

Todas éstas y similares noticias paralizan poco a poco al espíritu humano y le quitan luz del corazón. Es evidente que la humanidad atraviesa una época peligrosa, una crisis, pero es de esperar que ésta la coloque en la huella correcta.

Y luego nos dice, citando a Alice Bailey, al Tibetano y a Mme. Blavatski (autora del siglo XIX): “Cuando las fuerzas dobles de los hermanos cósmicos (Géminis) se conviertan en la energía de quien cabalga hacia la luz (Sagitario), entonces el cuarto se convierte en el quinto...”. [El “cuarto” es una alusión a la humanidad como el “reino de la forma”, y el “quinto” sería la expresión jubilosa de esa forma con “conciencia de sí”].

En Astrología esotérica se expresa que la Tierra es la regente esotérica tanto de Géminis como de Sagitario, o sea que éstas son las dos únicas constelaciones regidas por la Tierra. “...y este hecho es de mayor significación, creando una situación insólita en el sistema solar y una relación única. La línea cósmica de fuerzas desde Géminis hacia Sagitario y a la inversa, se relaciona subjetiva y esotéricamente con nuestra Tierra, garantizando así su desarrollo del Alma, el desarrollo de la forma como una expresión de esa Alma, y conduciendo a nuestra afligida humanidad sobre este atribulado planeta, inevitablemente, hacia la puerta misma de la iniciación, en Capricornio” (A.Bailey, Astrología Esotérica).

En otros términos, en estos momentos estaríamos viviendo tironeados entre “Castor y Pólux”, entre personalidad y alma, entre nuestros valores egoístas y nuestros valores desinteresados, entre el racismo o el nacionalismo xenófobo, y el espíritu de confraternidad universal. Este estado de disociación es el origen de todo el dolor del presente, en el planeta.

La dualidad

Géminis crea un conocimiento de la dualidad, y es evidente que esto está sucediendo en todo el planeta. Crecientemente, la gente va adquiriendo conciencia acerca de la dualidad. Para ello, la dramática humana se vive tironeada entre escenas de sobrevivencia vs. muerte – pureza vs. contaminación – egoísmo vs. desinterés- etc.

Otro cambio que proporciona Géminis a la humanidad,es el poder de la discriminación, o sea, la aptitud para convencerse de que ciertas cosas son beneficiosas y otras son dañinas. El conocimiento de la dualidad es pasivo, mientras que la discriminación es una operación mental, aunque no implica necesariamente acción.

El tercer cambio que introduce Géminis en la conciencia es la aptitud para elegir o para tomar una decisión. O sea, para actuar conforme se haya efectuado una elección discriminada.

O sea que luego de la elección correcta, Géminis ayuda a una persona a que tome conciencia de su propio Yo. La discriminación y la elección correcta conducen al hombre a un punto de desarrollo en el que comprende que él es el Yo. El conocimiento del Yo crece poco a poco a medida que esa persona continúa efectuando elecciones correctas en su vida física, emocional y mental, en sus campos individual, grupal, nacional e internacional.

El Tibetano nos dijo (a principios del siglo XX) que “La humanidad ... se halla en un estado de agitación, antes de dar un gran paso en el desarrollo autoconsciente y en la expresión del sentido de responsabilidad, que son la flor y el fruto primeros del conocimiento autoconsciente”.

Crisis, pruebas y aflicciones.

Durante la etapa de transición, desde los niveles de la personalidad hacia los del Alma, atravesamos por muchas crisis de todo tipo, cinco de las cuales pueden explicarse así:

- Miedo: se desarrolla cuando abandonamos las playas familiares de la personalidad y nos hacemos a la vela rumbo a los desconocido, acerca de lo cual hemos oído hablar pero de lo que aún no tenemos experiencia. Este puede ser miedo a la enfermedad, a la soledad, a la posesión o a la pérdida, a la guerra, a la desocupación, a la pobreza, a la violencia. O miedos que no tienen nombres.

- Renunciamiento: este es un signo que muestran las personas que dan pasos hacia el Alma. Renuncian a los objetos físicos y lentamente los desechan. Muy gradualmente renuncian también a algunos goces, a muchos deseos, a exhibirse, a la reputación, al orgullo, a las vanidades, a la separatividad. Renuncian a tiempo, energía y materia en bien de los demás.

- Depresión: pero hay que tener en cuenta que, en el camino de los renunciamientos, se puede caer en los pozos de la depresión, y que ésta puede originarse en la personalidad o en el alma. En estos momentos, en todo el mundo hay una gran depresión psicológica, debido por un lado a la necesidad de dejar atrás cosas que durante un largo lapso fueron muy preciadas (como la seguridad económica o la tranquilidad dentro del hogar o dentro de la ciudad, por ejemplo). También por la visión del futuro, que aunque sea vislumbrada como bella aún parece muy lejana, y en ocasiones se siente que nuestra nave no avanza con la velocidad suficiente.

- Ira: el mayor enojo inconsciente es por lo que podríamos llamar nuestras “deudas kármicas” que, de tanto en tanto, llegan para exigirnos los impuestos que les debemos. La vida a veces nos obliga a matar, mentir, ser hipócritas, vendernos, salvarnos a través de sobornos, explotar o robar a otros. Pero nuestra Alma siente, al ver a la personalidad inclinarse ante estos vientos en sentido opuesto de la vida, una fuerte resistencia. Entonces sentimos una ira real y no sabemos qué hacer. A veces a ésta se la llama “ira santa” y es la que, eventualmente, nos obliga a avanzar sensacionalmente y entrar por fin en las playas de la libertad.

- La codicia y el apego: cuando nuestra nave se hace a la vela hacia el océano abierto, desarrollamos un deseo de tener dentro de nuestra barca todo lo que dejamos atrás. Y sí, por casualidad, volvemos a las anteriores orillas, seremos una persona muy codiciosa.

El amor en Géminis
Esta luna llena nos pone en contacto con una vibración amorosa especial y generalmente desconocida. En este sentido, “amor” es una fuerza de apertura del centro del corazón para que la energía de la vida misma crezca dentro de nosotros. Esto se instala cuando empezamos a tener la experiencia vívida (y no sólo el convencimiento mental) de que el amor es lo que alimenta a toda la existencia.

Este no es el amor al que estamos acostumbrados. Este nos hace ver “belleza” en todo ser humano, en toda naturaleza, y no sólo en quienes nos son afines o pertenecen a nuestro grupo de afectos personales. Acá se comprende por qué Venus es otro de los regentes esotéricos del signo: porque ningún hombre puede ver belleza sin tener amor en su corazón. La belleza es la manifestación del amor verdadero. O podemos decir también que el amor nos transforma y convoca a la belleza dentro de nosotros.

El amor aparta de nuestro ser a los celos ocultos, los disuelve. Los celos son emociones que envenenan todo nuestro organismo, y son la causa de muchas enfermedades. Cuando de nuestra mente, de nuestro corazón, de nuestros músculos y huesos quitamos los celos, sentimos que dentro de nosotros surge una nueva vida, que nuestro horizonte se expande más allá de lo imaginado, y que la energía de la libertad circula en nuestro ser.

El amor hace que no hablemos de las debilidades de los demás, ni revelemos asuntos privados de nadie. Cuando amamos, no nos convertimos en jueces de los demás, por el contrario, si es posible ayudamos a los atacados, sin por eso herir a los otros. Cuando ocupamos nuestra mente con imágenes negativas que la gente crea acerca de los demás (debido a sus celos, envidia, odio e ignorancia) grabamos estas imágenes en nuestro ser, y eventualmente imitamos a esa gente en nuestra vida. El amor es paciente y muy a menudo espera ver la victoria del Alma, inclusive en condiciones adversas.

El amor nos torna humildes y extremadamente respetuosos de los que nos guían en el sendero espiritual. El amor genera en el ser humano espíritu de gratitud.

El amor nos hace intuitivos: las personas que más aman son las más intuitivas. El fuego del amor purifica los planos mental y emocional y las ideas, visiones y revelaciones se graban y reflejan claramente en el espejo de la mente sintética, sin distorsiones.

El amor es la presencia del Todo en cada una de las partes. Cuando somos amor estamos verdaderamente en todo, en todas partes. Nada puede ocultársenos. De esta manera, el amor es el camino real de la omnisciencia y la omnipresencia.

El amor constituye una coraza protectora alrededor de nosotros. Las fuerzas tenebrosas, las formas negativas de pensamiento, las intenciones destructivas de los demás, no pueden penetrar en nuestros vehículos si construimos esa coraza. Cuando nuestro amor sea inclusivo, ya no tendremos miedo a la magia negra, a la brujería, a las críticas injustas, a las malas intenciones y planes oscuros de los demás. Nadie podrá poseer ni obsesionar a un hombre o a una mujer que realmente ame o esté lleno de amor. El amor es totalmente vasto.

El amor aumenta nuestro empeño en procura del equilibrio y nuestro entusiasmo por el servicio.

Quien ama no puede ser herido ni ser susceptible. Siempre que nos sentimos heridos o susceptibles, es porque sentimos que no estamos equilibrados en nuestro amor. Cuando este equilibrio e integridad amorosa llegan a nosotros, nadie puede herirnos. Irradiamos amor y aceptamos al prójimo tal como éste es. Amamos y tomamos contacto con la divinidad del prójimo. Y aunque un hombre o una mujer nos cause problemas, veremos los resultados positivos de lo que él o ella creó dentro de nosotros y estaremos agradecidos.

El amor aumenta nuestra creatividad. Los grandes creadores son personas que aman porque el amor les hace “entender a las estrellas”, al arco iris, a los océanos y ríos, a los árboles y flores, a las aves y a los animales, a los seres humanos y la vida toda. La creatividad es un esfuerzo por ayudar a que la gran Vida se manifieste...

El amor nos armoniza con lo que está más allá de los límites de nuestras formas conocidas. Cuando el amor se expande de esta manera, empezamos a quemarnos en el fuego de la compasión. Nadie puede atravesar este fuego sin que la llama del amor lo purifique.

El amor nos convierte en colaboradores del cosmos y en fuentes de una corriente amorosa derramada por el mismo corazón del Sol. Para trabajar con los constructores de puentes debemos sentir un amor vasto, un amor que persista, perdone y ayude.


La energía de la resurrección, en Géminis.
La resurrección es una energía especial, la que nos permite salir de prisiones de las actividades involutivas, físicas, emocionales y mentales. La energía de la resurrección nos torna sensibles a la inspiración de lo más sintético del cosmos y del Yo real que hay dentro de nosotros. Resucitamos a nuestro Yo cuando empezamos a ver, primero, vislumbres como relámpagos reflejos en un espejo; luego el espejo desaparece y somos nuestro Yo. Luego continuará la revelación del Yo en los otros planos cósmicos, pero lo importante es saber que se trata de energía de resurrección, y que es la que está llevando al espíritu de una gloria a otra.

La energía de la resurrección nos hace ver lo vano de todos los apegos. Al pasar de un ciclo a otro, vamos prescindiendo de nuestros “ositos de peluche”, y pugnamos por otros valores más integrados.

La energía de la resurrección actúa, hasta cierto grado, en la época de transición y revela grandes verdades en nuestras Almas, en relación con nuestros “ositos de peluche” de la personalidad.

Esta energía cultivará el ímpetu, el impulso y el empeño por conocer y averiguar quiénes somos y qué somos.


La energía del contacto, en Géminis.
Es la energía que produce mayor “radiación” en pos de lo amoroso, y es perceptible en muchos hombres y mujeres que trabajan en distintos campos. Santos y discípulos en la antigüedad, dirigentes de todos los sectores del esfuerzo humano en la actualidad, llevan este sello cuando trabajan a favor del mejoramiento de la vida. Estas actividades no son por lo tanto necesariamente “religiosas” o “espirituales” sino que se dirigen, progresivamente, hacia una comprensión y una unidad mayores.

La energía del contacto es una energía unificadora. A través del puente que ella tiende, los seres humanos pueden desarrollar continuidad de conciencia desde un plano a otro, hasta que esa conciencia incluya al Yo.

Las personas pueden vivir unas con otras largo tiempo, sin tener un verdadero contacto con el Alma. Este contacto es un instante de tremenda eclosión jubilosa. Tal contacto nos ayuda a alcanzar niveles cada vez más altos. Es el momento de fusión con una correspondiente frecuencia más alta, que está presente o es suscitada en una persona o centro.


Reacciones ante la potencia de esta energía

Géminis se relaciona con el “corazón del Sol”. En esta fase, ciertas influencias zodiacales fundamentales (sintetizadas y coordinadas) se concentran en nuestro planeta. Esto produce tensión, acción y reacción, y el estado de lucha potente y de dificultad que es tan característico de nuestra vida planetaria, pero a su tiempo produce el despertar de la humanidad a la plena conciencia planetaria.

La distribución de esta energía causa en nosotros ciertas reacciones que tienden a experimentarse como:

- Revelación: es cuando las cosas llegan a la superficie, y muchas son cosas bellas de las que ni siquiera estábamos al tanto. Aparecen vívidamente en nuestra conciencia grandes sueños. Se nos aproximan grandes visiones, visiones que estaban muy lejos. En la época de la Luna Llena casi las tocamos, las vemos, las sentimos, y tenemos un mayor contacto con ellas. Se nos revelan las mayores bellezas de otras personas, y a su vez estas bellezas de los demás llaman nuestra atención sobre muchas cosas feas y negativas, ocultas en nuestra propia naturaleza.

- Expresión y expansión: una vez que estas visiones ocultas se ponen en libertad, expanden nuestro espacio interior. Nos vemos a nosotros mismos un poco mejor, y tenemos la valentía para seguir nuestros sueños y visiones. La expansión y expresión causan creatividad y con ésta, podemos significar acciones con las que nos construimos, reformamos y recreamos, a la luz de una nueva visión. Nadie puede expandirse sin creatividad. En este acto, ponemos de manifiesto al Yo real.

- Decisión: ¿qué hacer con estas revelaciones? Es preciso decidir de qué forma, en qué plano, en qué dosis, dónde y cuándo revelar nuestras visiones, ideas y nuestro Yo verdadero. Aquí empieza el problema, porque deberán despejarse muchísimas cosas de nuestra naturaleza, antes de que podamos poner en práctica nuestras visiones. Por ejemplo: si tuviéramos un gran sentido de la solidaridad y voluntad de ayudar a los más desprotegidos... ¿cómo se presentaría esa voluntad en nuestra vida cotidiana, cuando nos sintamos sin ánimo de seguir porque la tarea se hace demasiado pesada?
Nuestro logro futuro se basará en nuestra decisión.

- Cambios: luego de tomar la decisión, las revelaciones y el conocimiento nos exigen que cambiemos... ¿qué? Pues nuestro modo de vivir, sentir, hablar, relacionarnos, planificar y crear. Pero no es fácil cambiar... Exige mucha observación de nuestra parte para percibir si los cambios son sólo mecánicos u obedecen a movimientos conscientes. El cambio necesita energía, planificación y sabiduría.

- Empeño en procura de nuevos niveles: el cambio, si es auténtico, clausura un viejo ciclo, una puerta vieja, e inaugura un nuevo ciclo, una nueva puerta. Una nueva visión. Llega un momento en el que nos preguntamos: ¿en pro de qué nivel estoy empeñado en cambiar? ¿En el de mi personalidad o en un nivel más amplio, más cercano a mi Yo real? Un ejercicio interesante consiste en pescar en qué nivel está funcionando nuestra mente cuando estamos distraídos... ¿en qué pienso, adónde vuelan mis pensamientos antes de dormirme, por ejemplo?

Estando continuamente atentos a la dualidad en nosotros, puede crearse un nuevo empeño en procura de nuevas síntesis, porque esta Luna Llena de Géminis es, recordemos, la culminación de las tres lunas llenas principales del Zodíaco.


En Géminis tenemos la máxima oportunidad de rever la cosecha de las tres lunas y poner nuestra nueva vida en relación con el mundo y la humanidad entendidos como unidad. Esta es la noción del Amor en Géminis, es lo que nos permite rever el camino que la humanidad tomó hasta el presente, y evaluar qué podemos hacer para ayudar en el giro que es preciso imprimir a dicho rumbo.

INVOCACIÓN UNIVERSAL

Los hijos de los hombres son uno solo y yo soy uno solo con ellos.
Busco amar, no odiar...
Busco servir, no exigir debido servicio...
Busco curar, no herir...
Que el dolor aporte debida recompensa de luz y amor
Que el alma controle a la forma externa, y a la vida y a todos los acontecimientos
Y revele el amor
Que subyace en los sucesos del tiempo.
Que lleguen la visión y la intuición
Que se revele el futuro
Que aparezca la unión y desaparezcan las divisiones externas
Que prevalezca el amor
Que todos los hombres amen...

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.